UN ESTUDIO DEMUESTRA QUE EL NIVEL DE ACTIVIDAD ELÉCTRICA DE UNA CÉLULA NERVIOSA ESTABLECE SU GRADO DE MIELINIZACIÓN.
Un equipo de investigadores liderado por científicos australianos ha descubierto que estimular las células nerviosas en el cerebro favorece que la mielina se deposite en torno a dichas células. Este descubrimiento podría abrir nuevas vías para fomentar la reparación de la mielina en personas con Esclerosis Múltiple (EM).
Las células nerviosas, o neuronas, envían señales a través de los axones desde y hacia el resto del cuerpo para mover músculos y permitirnos sentir, interpretar e interactuar con el mundo que nos rodea. Muchos axones están protegidos por una capa aislante denominada mielina, que permite que las señales nerviosas se desplacen a gran velocidad y que además suministra nutrientes a las neuronas.
En la EM, esta capa de mielina sufre daños y se vacía, lo que reduce la capacidad de las neuronas para comunicarse entre ellas y altera la transmisión de señales entre el cerebro y el resto del cuerpo. Esta alteración es la que produce los síntomas de la Esclerosis Múltiple. Con el paso del tiempo, sin la protección y los nutrientes de la capa de mielina, la célula nerviosa muere y se producen daños irreversibles.
En la investigación sobre la EM, los esfuerzos se están centrando en descubrir maneras de restablecer los niveles de mielina cuando estos se vacían por causa de la enfermedad. Un planteamiento consiste en descubrir cómo se produce el recubrimiento con mielina de las células nerviosas durante un desarrollo cerebral normal. Comprender estos mecanismos podría revelar claves importantes para crear terapias dirigidas a fomentar la regeneración de la mielina y poner fin así a algunos de los síntomas de la EM, con la posibilidad de invertir la discapacidad producida.
LA ACTIVIDAD ELÉCTRICA QUE PUEDE INFLUIR EN LA MIELINA
Ahora, por primera vez, un grupo de científicos ha descubierto que el nivel de actividad eléctrica de una célula nerviosa establece el grado de mielinización de la misma.
En este estudio, publicado en Nature Communications, el Dr. Tobias Merson (Instituto de Medicina Regenerativa de Australia/ARMI en la Universidad de Monash) y su equipo han demostrado que estimular los axones individuales en cerebros de ratones aumentaba la producción de células generadoras de mielina, denominadas oficialmente oligodendrocitos. Se descubrió que estos oligodendrocitos prefieren depositar mielina en los axones activados y la mielina en dichos axones también formaba una capa más gruesa. Por el contrario, reducir la actividad de las neuronas también reducía su nivel de mielinización.
Desde hace ya algún tiempo, se sabe que aprender a realizar determinadas tareas, como hacer malabarismos o tocar instrumentos musicales, aumenta el grado de mielinización en el cerebro. Este estudio, que indica que la cantidad de mielina en torno a una célula nerviosa depende de su nivel de actividad, podría explicar este fenómeno. Este descubrimiento fundamental podría ayudarnos a explorar nuevas vías para fomentar la reparación natural de la mielina en los cerebros de las personas con EM.
Aunque esta investigación se encuentra aún en fase inicial, supone un importante paso adelante y podría sentar las bases que nos permitan manipular la reparación de la mielina. Los planteamientos terapéuticos que aumentan la activación de determinadas células nerviosas se podrían complementar con fármacos que favorezcan la remielinización, reduciendo o posiblemente invirtiendo la discapacidad de una persona con EM.
FUENTE: Esclerosis Múltiple España (http://www.esclerosismultiple.com)
Federación Internacional de Esclerosis Múltiple (www.msif.org).